A fines del segundo semestre de 2024 y como parte del curso Calidad de Agua, impartido en la carrera de Ingeniería Civil de la Universidad de Chile, las y los estudiantes realizaron una salida a terreno a dos puntos estratégicos: el río Maipo, en el sector del Puente Las Vertientes, y la Planta de Agua Potable La Florida. Esta actividad, que combina el aprendizaje teórico con experiencias prácticas, tuvo como objetivo principal que los estudiantes comprendieran la variabilidad y complejidad de los recursos hídricos, y la importancia de su monitoreo y tratamiento.
Durante la salida, el grupo de estudiantes pudo tomar muestras de agua y evaluar diversos parámetros físicos, químicos y microbiológicos, tales como turbiedad, pH, sólidos disueltos, temperatura y calidad bacteriológica. En el río Maipo, analizaron un cuerpo de agua en su estado natural, lo que les permitió observar las condiciones de un recurso hídrico que abastece a gran parte de la Región Metropolitana. Por otra parte, en la Planta de Agua Potable La Florida, los estudiantes pudieron conocer en detalle el proceso de potabilización, los controles de calidad implementados y cómo se garantiza un suministro seguro de agua a la población.
La actividad no solo permitió reforzar los conocimientos técnicos aprendidos en el aula, sino que también representó una instancia de formación crítica para las y los futuros ingenieros civiles de la Universidad de Chile, quienes estarán llamados a enfrentar desafíos relacionados con la gestión, tratamiento y protección de los recursos hídricos. La profesora Ana Lucía Prieto diseñó esta salida para que el grupo de estudiantes pudiera observar directamente las diferencias entre un cuerpo de agua natural y uno procesado, entendiendo la magnitud del trabajo requerido para asegurar su calidad.
En la carrera de Ingeniería Civil, y particularmente en la mención de Hidráulica, Sanitaria y Ambiental, este tipo de experiencias prácticas resulta fundamental, ya que permite a las y los estudiantes aplicar sus conocimientos en contextos reales, analizar problemáticas de infraestructura hídrica y adquirir una visión integral de la gestión del agua en el país. La salida a terreno no solo refuerza la formación técnica, sino que también potencia la reflexión sobre el rol social y ambiental del ingeniero civil, preparándolos para abordar desafíos como el acceso equitativo al agua potable, la protección de cuencas y el desarrollo de tecnologías sostenibles en un contexto de cambio climático y creciente demanda de recursos hídricos.
La Universidad de Chile, a través del Departamento de Ingeniería Civil, continúa apostando por la integración de instancias prácticas como esta, que buscan formar profesionales capaces de liderar proyectos de infraestructura con una mirada crítica, innovadora y comprometida con la sociedad y el medioambiente.