En agosto de 2016, Francisco Hernández ingresó al Departamento de Ingeniería Civil como profesor, pero su relación con la Universidad de Chile se remonta a años anteriores, cuando realizó sus estudios de Ingeniería Civil y luego el magíster en Ingeniería Sísmica. Al egresar trabajó unos años en SyS, empresa de los reconocidos académicos Rodolfo Saragoni y Mauricio Sarrazín. Posteriormente, sus ganas de seguir aprendiendo lo impulsaron a realizar un doctorado en ingeniería estructural, especializándose en el área sísmica y el estudio de explosiones e impactos en estructuras en University of Western Australia.
Desde joven, la docencia despertó su interés, y durante su paso por la escuela, fue auxiliar y ayudante de más de 20 cursos. Francisco fue elegido por tres años consecutivos el mejor profesor auxiliar del departamento, según sus propios estudiantes. Después de completar su doctorado en Australia, regresó al Departamento de Ingeniería Civil de la Universidad de Chile como académico.
¿Qué es lo que más lo marcó en su paso por el departamento?
“Creo que el sueño de toda persona que quiere ser académico y sale de esta facultad, es ser profesor de esta misma facultad. Mi sueño siempre fue ese, ser profesor en la Universidad de Chile y lo cumplí. Fui muy feliz en el departamento, tuve el placer y el honor de enseñar a estudiantes y de supervisar sus investigaciones”, señala el profesor. Durante su tiempo en el departamento, guió más de 40 tesis de memoria, brindando apoyo a sus estudiantes para alcanzar niveles académicos sobresalientes. Su compromiso con la docencia y su habilidad para motivar e inspirar a sus alumnos dejaron una huella imborrable en la vida de muchos de ellos. La conexión cercana con sus estudiantes y el cariño que le profesaban resultaron ser los mejores regalos y gestos de agradecimiento que el profesor recibía con humildad y gratitud. “Agradezco la oportunidad haber tenido los alumnos que tuve en el departamento”, agrega.
En lo que se refiere al equipo de trabajo el profesor Hernández destaca que siente “una tremenda admiración por cada uno de los profesores del departamento. Especialmente hacia quienes me formaron como ingeniero y luego fueron mis colegas”. Por otro lado, sobre su trabajo dirigiendo el Laboratorio Experimental de Estructuras (LEE), lo que más destaca es la labor de don Pedro Soto, a quién está profundamente agradecido, “destaco su dedicación en el laboratorio, donde realiza tareas vitales, como los ensayos de investigación y la supervisión de la Red de Cobertura Nacional de Acelerógrafos (RENADIC). Su compromiso en la enseñanza es evidente, y su labor es esencial. Creo que hacen falta más individuos como él, no solo en la Universidad, sino en Chile en general”
¿Qué viene de ahora en adelante?
Dado su compromiso y amor a la casa de Bello, el profesor Francisco seguirá colaborando con sus colegas “Felipe Ochoa, César Pastén, con quienes he trabajado un montón. Espero en un futuro poder hacer un proyecto conjunto con Juan Felipe Beltrán. Pretendo también, en el futuro trabajar también con Francisco Pinto, quién se está incorporando el departamento”, señala. Además, expresó su entusiasmo por establecer nexos con su nueva casa, “para compartir los instrumentos del Laboratorio de Estructuras que yo dirigía, compartamos datos, entre otras cosas. Siempre voy a estar abierto a todo de colaboraciones, investigaciones conjuntas, recibir o enviar tesistas.”
Por otro lado, seguirá haciendo lo que más le gusta: ejercer la docencia e investigación, pero en otro lugar. Hoy se encuentra en la Facultad de Ingeniería de Ciencias Aplicadas de la Universidad de los Andes, donde enseñará a estudiantes de pregrado y postgrado, tanto de magíster como de doctorado. Su mayor aliado será el profesor Rodrigo Astroza, Vicedecano de la misma facultad, ex compañero del profesor Hernández, quien también fue alumno destacado en el departamento. Actualmente el profesor Astroza tiene varios proyectos, para los cuáles se ha adjudicado fondos públicos, y tiene una basta producción en cuanto a artículos científicos. "Personalmente, creo que es una de las personas top dentro de la ingeniería, como yo, entonces trabajando juntos considero que podemos hacer un gran aporte a la ingeniería sísmica chilena”
Un mensaje para la comunidad DIC
“Quiero expresar mi agradecimiento a estudiantes y profesores. Me siento honrado de haber podido estar aquí, de ver el crecimiento de las y los estudiantes. Es súper gratificante ser partícipe del proceso de estas personas que, de alguna forma pasan a ser como tus hijos por un tiempo, que llegan con una base y luego se convierten en grandes profesionales. Eso, me parece, es lo que anhelamos todas las personas que ejercemos la docencia, formar gente y verla crecer.”
Desde el Departamento de Ingeniería Civil destacamos el trabajo de Francisco, ejemplo vivo del impacto positivo de un académico comprometido con su labor como docente e investigador. Su entrega y amor por la ingeniería civil han dejado una huella imborrable en la Universidad de Chile y en sus estudiantes.